El Caballero de la Armadura Oxidada es un libro que lleva deambulando por mi casa durante años. Pese a las recomendaciones de mucha gente acerca de lo bueno que era, nunca tuve gran interés por él. No obstante, cuando leí las instrucciones sobre el trabajo individual y observé que este libro era una de las opciones, lo consideré como un señal para adentrarme en sus páginas.
La verdad es que me ha sorprendido mucho, no esperaba que el libro fuera de este modo. Cada capítulo te muestra de forma muy sutil pero de igual modo, clara, muchas verdades acerca de la vida y de la persona. Considero que en el desarrollo del trabajo he ido identificando cada sentimiento, cada sugerencia que el libro me iba aportando.
Si algo tengo que destacar, en mi opinión las personas no damos la importancia que deberíamos al amor por uno mismo, y es verdad que cuando uno se quiere y se entiende a sí mismo, es más fácil y más gratificante hacerlo con las demás personas. El valor de conocerse a uno mismo, de quererse tal y como es, de no intentar mostrar algo que no es, porque como bien dice, algo que no existe, no se puede mostrar, y si sientes la necesidad de mostrarlo, es que realmente no es verdad.
Considero que este escrito me ha aportado más de lo que en un principio pensaba. Página a página el libro me hacía cuestionarme aspectos de mi vida y reflexionar acerca de ellos: creo que tenía que haber hecho caso de aquellas voces que me dijeron en su momento que lo leyera, porque creo que el trayecto hasta el día de hoy hubiera sido más sencillo. O al menos, me hubiera ayudado a comprender mejor muchas circunstancias y a ahorrarme muchos dolores de cabeza. Pero como se ha ido explicando, la vida es un trayecto largo y con muchos atajos y caminos: debemos saber cuál elegir y comprender las consecuencias de las elecciones. Debemos aprender con cada paso e intentar dar lo mejor de nosotros mismo, porque la vida es conocimiento y el conocimiento es poder.
No obstante, sopeso que si yo no hubiera conocido lo que es el Coaching, la Autoconfianza y la IE antes de leer este libro, no lo hubiera comprendido como creo que lo he hecho ahora.
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